Tengo las manos
llenas
de lágrimas
con su voz,
una llaga que
se mueve
por mi cintura,
rodeándome
de ausencia tangible,
he cortado
todas las rosas del
amanecer,
llega el sol rojo,
con su inercia
de continuidad.
No se para la vida.
Tampoco el dolor.
martes, 23 de enero de 2018
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
Transito en tu pulso, callada, para que no despierten los celos de tu sangre. Traigo las estrellas que cayeron sobre mí la última m...
-
Eres luz, un brillo revoloteando en mi pecho, el cielo cayendo despacio como lluvia de verano, la oportunidad de Amar, el privilegio reno...
-
Consiénteme los sueños esta noche en que siento el mar tan lejos como tus labios. Y cuéntame esa historia de hadas en las olas inventan...
No hay comentarios:
Publicar un comentario