miércoles, 22 de febrero de 2017

Entrelazamiento cuántico











Despiertas 
y se abren mis ojos. 

El día comienza con el final de tu sueño por el que vuelo. Te bajas de la cama y siento la hierba de mármol en los pies. Avanzo por el camino preestablecido en tu pensamiento. Quiero besarte. El universo se pliega un instante para acercarte. Tu beso me sujeta a la luz (permanencia del fuego en el viento de invierno). El universo ya no podrá volver a sus geometrías antiguas. Te quedarás en mí, contando suspiros rojos, viendo desaparecer desiertos en satélites recién creados, encendiendo planetas con los dedos. Ahora lo sabemos. El mundo ha sido creado para que estemos juntos y la noche no sea más que un roce apasionado de nuestros labios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario