jueves, 7 de septiembre de 2017

Tu sonrisa se me está subiendo a la cabeza



¿En tu cama o en el suelo?
Dónde vamos a prenderle fuego
al movimiento 
hasta ser una única llama 
que se arrastre camino del infierno.

Hoy he vuelto a verte y aunque me hablas del presente, el pasado permanece inmóvil en tus ojos. Esta vida separados nos va acercando más a la muerte. 

[No sé si el error fue terminar o conocernos. Siempre encontré el mar en tus dedos. Todos mis suspiros se hicieron sobre ti, lugar eterno. ¿Te acuerdas de París? Yo recuerdo tus labios traficando calor en mi cuerpo.

(Hace frío. Quizá mañana llueva).

Tu sonrisa se me está subiendo a la cabeza y tengo que conducir luego...

¡Ay, cuántas noches me pasé en tu espalda contando caricias y sueños! Sentía una fragancia sin dolor corriendo por mis venas. Me decías: "es mi amor, se te ha colado dentro. Y no voy a irme hasta que muera. Incluso después seguiré en ti. Seré luz violeta en tu alma. La eternidad te nombrará con mi voz].

¿En las escaleras o contra la barra?
En qué estancia del bar
vas a soltar una carcajada
cuando me veas arrodillarme,
con el jadeo al borde del aliento,
para abrazarte como más me gusta:
con la boca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario